Se trata de una infección respiratoria causada fundamentalmente por los virus de la gripe tipos A y B, que pueden originar una enfermedad que dependiendo de los casos puede ser leve o severa y puede conllevar la hospitalización e incluso la muerte.
Los niños pequeños, los adultos mayores y las personas que padecen patologías crónicas pueden tener un mayor riesgo de sufrir complicaciones graves, como neumonía viral y neumonía bacteriana secundaria, junto con el empeoramiento de las afecciones médicas previas.
Se trata de una infección respiratoria causada fundamentalmente por los virus de la gripe tipos A y B, que pueden originar una enfermedad que dependiendo de los casos puede ser leve o severa y puede conllevar la hospitalización e incluso la muerte.
Los niños pequeños, los adultos mayores y las personas que padecen patologías crónicas pueden tener un mayor riesgo de sufrir complicaciones graves, como neumonía viral y neumonía bacteriana secundaria, junto con el empeoramiento de las afecciones médicas previas.
Es importante hacerle saber al médico la aparición de síntomas de la gripe. Los síntomas más comunes incluyen:
De este modo, la gripe estacional se caracteriza por el inicio súbito de fiebre, tos seca, dolores musculares, articulares, de cabeza y garganta, intenso malestar y abundante secreción nasal. La tos puede ser intensa y durar 2 semanas o más. La fiebre y los demás síntomas suelen desaparecer en la mayoría de los casos en el plazo de una semana, sin necesidad de atención médica.
A nivel mundial, se calcula que las epidemias anuales de gripe causan de 3 a 5 millones de casos graves y de 290.000 a 650.000 muertes. La hospitalización y la muerte son más frecuentes en los grupos de alto riesgo, incluyendo a las personas mayores. De este modo, en los países industrializados la mayoría de las muertes relacionadas con la gripe se producen en personas mayores de 65 años.
En la temporada de gripe 2019-2020 la gripe causó en España 619.000 casos confirmados, con 27.700 hospitalizaciones, 1.800 admitidos en UCI y 3.900 muertes. Los datos sobre la vacunación señalan que esta evitó un 26% de hospitalizaciones, un 40% de ingresos en UCI y un 37% de muertes. Sin embargo, solo se vacunó al 53,5% de las personas mayores de 64 años, lejos del objetivo del 75% de esta franja de población.
En la temporada 2020-2021, ampliamente marcada por la pandemia de la COVID-19, se observó la disminución generalizada de la circulación de virus gripales, debido, probablemente, a las medidas de control y distanciamiento social. Otros factores que pudieron contribuir incluyen la disrupción de la atención médica causada por la pandemia y la capacidad disminuida de la realización de pruebas que afectó negativamente en la notificación de datos epidemiológicos y virológicos.
La mejor arma contra la gripe, además de la higiene y la vida saludable, es la vacuna. La vacunación antigripal tiene como objetivo reducir la mortalidad y morbilidad asociada a la gripe y el impacto que cada año tiene la enfermedad. Principalmente va dirigida a proteger a las personas que tienen un mayor riesgo de presentar complicaciones y a las que pueden transmitir la enfermedad a las personas vulnerables.
Este año es especial debido a la coexistencia de la gripe con la COVID-19. El efecto sinérgico observado entre el virus de la gripe y el SARSCoV-2 puede multiplicar por dos el riesgo de muerte en caso de coinfección. Por ello, es necesario enfatizar la importancia de aumentar la cobertura de vacunación frente a la gripe, especialmente en las personas mayores, el personal sanitario y las personas con condiciones de riesgo.
Como sucede cada año por las variaciones que presenta el virus, para la presente campaña de la gripe la composición de las vacunas ha sido actualizada.
Las vacunas trivalentes recomendadas para esta temporada 2021-2022 deben contener los siguientes componentes:
Las producidas a partir de huevos embrionados y las vacunas vivas atenuadas:
Las producidas a partir de cultivos celulares:
Las vacunas tetravalentes deben contener en su composición, además de las anteriores, una cepa análoga a B/Phuket/3073/2013 (linaje B/Yamagata/16/88).
Finalmente, hay que significar que las vacunas contra la gripe y las vacunas contra la COVID-19 pueden aplicarse al mismo tiempo.
Los grupos de población a los que se recomienda ponerse la vacuna contra la gripe son:
La campaña de vacunación se inicia entre la segunda quincena del mes de octubre y la primera semana del mes de noviembre.
Además de la prevención que se puede conseguir con la vacuna, algunos medicamentos pueden acortar el curso de la gripe o reducir su severidad:
En Senniors ofrecemos todos los servicios para cuidar de la salud, incluyendo la higiene en el domicilio y la limpieza.