Cuando el ingreso se prolonga, sabes que acompañarle a todas horas puede ser muy agotador y complicado.
Por un lado, la incomodidad de estar en un hospital: no dormir bien, comidas poco saludables y a deshoras, apenas pasar por casa, el ambiente deprimente de los hospitales…
Por otro lado, la dificultad de compaginar tu vida diaria con el acompañamiento hospitalario: faltar al trabajo, no poder ocuparte de tus hijos, desatender tareas domésticas y otras obligaciones…
Además, para tu ser querido tampoco es agradable estar ingresado en un hospital y sus sentimientos, además de la preocupación por su estado de salud, también te afectan.
Con el paso de los días se va creando un acúmulo de tensiones físicas y emocionales.
Es un buen momento para pedir ayuda.
Para solucionar estas situaciones y evitar que se hagan insostenibles, desde Senniors creamos el servicio de acompañamiento hospitalario.
Cuando el ingreso se prolonga, sabes que acompañarle a todas horas puede ser muy agotador y complicado.
Por un lado, la incomodidad de estar en un hospital: no dormir bien, comidas poco saludables y a deshoras, apenas pasar por casa, el ambiente deprimente de los hospitales…
Por otro lado, la dificultad de compaginar tu vida diaria con el acompañamiento hospitalario: faltar al trabajo, no poder ocuparte de tus hijos, desatender tareas domésticas y otras obligaciones…
Además, para tu ser querido tampoco es agradable estar ingresado en un hospital y sus sentimientos, además de la preocupación por su estado de salud, también te afectan.
Con el paso de los días se va creando un acúmulo de tensiones físicas y emocionales.
Es un buen momento para pedir ayuda.
Para solucionar estas situaciones y evitar que se hagan insostenibles, desde Senniors creamos el servicio de acompañamiento hospitalario.
Es un servicio que puedes contratar por horas, noches o días completos.
Cuando el ingreso termina, también es posible continuar con los cuidados en el domicilio.
Las acompañantes son profesionales formadas y cualificadas para atender a personas mayores y/o con dependencia. Todas nuestras cuidadoras pasan procesos de selección muy rigurosos. De hecho, solo el 5% de las candidatas llega al final del proceso.
Entre sus labores no están, evidentemente, el cuidado médico, el cual ya está a cargo del personal hospitalario. Pero sí todo lo demás, como ayudar a tu familiar a asearse, comer, tomar su medicación, acostarse y levantarse, y seguir las indicaciones provistas por el personal sanitario.
Además, puede informaros a ti y al resto de la familia sobre lo que haya sucedido en vuestra ausencia: visitas médicas, pruebas, cambios en la medicación, traslados de habitación, etc.
Contar con un profesional que ofrezca apoyo en el acompañamiento hospitalario tiene muchos beneficios.
Para tu ser querido:
Para ti y el resto de la familia:
Desde Senniors defendemos la validez, el derecho y la necesidad de pedir ayuda. Y más aún, creemos que hacerlo es beneficioso para ti, para tu ser querido y para toda la familia.
¡Cuenta con nosotros! Ofrecemos un servicio de acompañamiento hospitalario adaptable a tus necesidades y las de tu familiar ingresado. No dudes en consultarnos.